Paréntesis electrónico. La lluvia impidió que se llevara a cabo en su totalidad el festival, pero el tiempo que la lluvia cesó disfrutemos de grandes conciertos y de un ambiente fenomenal.

El festival empezó el jueves 17, teniendose que suspender los últimos tres conciertos por el fuerte viento que soplaba en el recinto hípico de Cáceres, por lo que la jornada del viernes comenzó con uno de esos grupos, Mamá Ladilla, que hizo un directo divertido, con sus letras cargadas de humor e ironía. A continuación turno para Disidencia y Narco, con un rock rápido, como acostumbran. Les seguirían los extremeños Sinkope, que ante su público se crecieron y ofrecieron un gran concierto, con un Vito muy inspirado.

Sobre las 18:30 comenzaba el concierto de Violadores del Verso, haciendo como es habitual en sus conciertos, bailar y cantar a la gente, preparándolos para el comienzo del «prime-time» del festival.

Seguidamente una de las sorpresas del festival y uno de los grupos que más hizo bailar al público. Aprovechando los escasos rayos de sol, Gwendal desplegó su pegadiza música celta, con violines, flautas y guitarras para ofrecer 45 minutos geniales.

El Sevilla aparecía enfundado en su abrigo de bisón sobre las 20:30, comandando el concierto de los Mojinos Escozios, un poco corto y sin tiempo para las habituales bromas, limitandose a tocar sus temas más conocidos y dar paso rapidamente a Albertucho.

Acabado éste, entro en escena Edguy, heavy clásico que hizo menear cabezas y saltar pies.

Ya de noche, Def con Dos ofreció su directo demoledor, increible la fuerza que despliega el grupo en sus conciertos, de lo mejor del festival. Los veteranos Porretas les seguirían, haciendo un concierto basicamente de grandes éxitos, como Marihuana, Dos Pulgas En Un Perro, Porretas, etc.

Sobre las 2 de la madrugada entró en escena el grupo al que un servidor se moría de ganas de ver. Reincidentes ofreció casi una hora de su punk-rock lleno de hits que hizo que la gente se olvidara del mal tiempo por un rato y se dedicara a corear temas como Vizio, Un pueblo, Ay Dolores y así hasta casi una docena.

Al día siguiente la organización decidió suspender el festival debido a la inundación de los escenarios y la amenaza de más lluvia. Esperemos que el año que viene el tiempo respete el Extremúsika y podamos disfrutar del festival entero.

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